Se supone que en esos días en que la pareja se va de viaje y te deja solo en casa, de Rodríguez, uno debe sentirse liberado, aprovechar para disfrutar de su soledad, para hacer esas cosas que no hace con la pareja... Que debe ser guay, vaya.
Pues para mí no lo es. Vale que yo soy una tía, y el término Rodríguez en este sentido siempre parece que vaya referido a los hombres que se libran unos días de "la parienta".
Obviando la gilipollez de que sólo el hombre pueda sentirse aliviado cuando la pareja se pira, resulta que en casa yo hago las tareas de bricolaje y a él le gusta ir de compras. Así que el término en cuestión me lo puedo pretender aplicar a mí misma si me da la gana.
Bueno, a lo que iba. No disfruto de mi Rodriguecería. Es un rollo patatero y un cansancio absoluto.
Ahora de verdad aprecio (antes también, aunque no lo dijera, pero ahora más) lo guay que es dividir las tareas de la casa y, sobre todo, sobre todo, sobre todo, lo maravilloso que resulta que mi santo asuma prácticamente todas las tareas en esas semanas (como la que nos ocupa) en las que curro catorce horas al día: encontrar la cena hecha cuando llego, la ropa limpia y recogida, que no haya trastos por medio, que haya comida en la nevera, que se haya sacado la basura... Y todas esas cosas de las que no puedo ocuparme cuando el curro me saca del mundo, pero que siguen en marcha casi sin que lo perciba.... hasta que no es así.
Llevo una semana comiendo crema de puerros (¿cómo coño se escribe? ¿vichesoi?), queso brie, paté y una hamburguesa del burriquín.
Pero esto no es sólo una cuestión de por el interés te quiero Andrés, no. No sirvo para estar sola.
Me crié en una casa repleta de gente, me gusta el bullicio, me gusta la compañía.
Disfruto de ciertos momentos de soledad. Por ejemplo de esos domingos en que mi santo trabaja, y yo no, y me quedo en casa, y lloro con el telefilme y me doy un bañito caliente, me pongo buena música, un buen libro, una copita de vino... Pero ya. Me basta con unas horas de vez en cuando.
Es un auténtico rollazo llegar a casa y que no haya nunca nadie. No tener con quien comentar las noticias o lo capullo que es House, echo de menos abrirme una cervecita y contarle tonterías mientras él acaba la cena... echo de menos compartir los momentos, jobar. ¡Esta mañana no he podido comentar con nadie la muerte de la Jurado!
En estos días me estoy quedando alucinada con algunos amigos míos que disfrutan viviendo, saliendo y viajando solos. A mí me parece un peñazo.
Así que, a partir de ahora, me parece genial que Quic se vaya de viaje, pero que me deje a alguien en casa para hacerme compañía, leñe.
10 comentarios:
La solución, la procreación.
No jodamos, Sue, no jodamos.
Además, eso puede ser que solucionara el tema de la compañía, pero agravaría el de las tareas domésticas.
Vichysoisse. Y Sue, no acabo de ver que eso sea, en sí, una solución. Sustituyes la sensación de soledad por la de angustia vital como consecuencia del exceso/defecto de sueño, de apetito, de defecación o de lloros. Así que no. Si los niños naciesen con cierta edad, la de aquel. Pero hasta los tres años o así no son muy acompañativos. Son saturantes, pero eso es otro tema (y sí, todo muy tierno y tal pero no estamos hablando de eso).
Bueno, pues entonces la solución es salir por ahí todas las noches hasta las tantas, que también pudiera ser...
o hacer aquello que él odia y que nunca te deja hacer en casa. Servirá para descargarte.
Pufff yo que va, ni bricolage ni compras ni ná. Abusaba de la situación hasta momentos límites. Debe ser por eso que me quedaba en la gloria de Rodríguez poniendo los piés en el sofá y la cerveza en la mesa (sin posavasos JA!). Tampoco es que ahora envidie tu situación, puesto que ahora vivo sólo y estoy de rodríguez todos los días, pero oye, de algo habrá que quejarse, no ?
jaja muy bueno el final... A mí a antes me gustaba mucho estar solo, ver una peli o algo así, pero ahora me pasa un poco como a tí, que necesito comentar las cosas, etc.. no necesariamente con la parienta pero bueno ;) hala, a dormir me voy
rodriguez.... no sólo soy una esperta, sino que mi futuro bastardo tomará ese nombre como suyo, para ir acostumbrandose. De 365 dias al año, fijo 165 estoy sola solita, menos mal que ahora comparto casa, pero te acostumbras a estar sóla y mandar mensajes a tu hermana para comentar lo que acaba de pasar en la serie, y llamar corriendo en los intermedios, etc,....
Cuando tu chico trabaja a 160 km vives con ello y lo llevas bien, dile a quic, que se vaya más a menudo y vas a ver como te acostumbras,jejeje
ele..., que serie compartimos??
si ya ni operacion triunfo....
Nuria: barre, pasa el mocho (o motxo), limpia ventanas, pone lavadoras, cuelga la ropa, hace compra (algo de comida y muchas cosas de bellza femenina) y mantiene la casa organizada.
José: plancha, cocina, compra (comida y necesidades puntuales), se ocupa del administración económica.
Somos desordenados y tocapelotas... pero lo pasamos mas bien
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